la frontera norte según un chilango
(foto jesús lópez)
El mejor lugar para viajar en un bus definitivamente siempre será el que te permita ver la carretera de frente, algo que he venido pensando estos días es que podría pasar mi vida entera subiendo y bajando de un bus o de un avión; cruzar esa “línea” imaginaria llamada frontera es para muchos de nosotros en Juárez solo cuestión de pagar dos o tres pesos (previamente habiendo aflojado más o menos 1500 pesos que es lo que cuesta una visa “gabacha”) un parqueadero de 30 pesos, una caminata por unos retenes, una fila de 5 a 10 min. y una escaneada de la persona que te toque al momento de cruzar. Se lee fácil ¿no es así? Pero esta experiencia que nosotros tomamos como un fetiche o gusto (en especial para mi que es inexplicable mi atracción hacia las ciudades fronterizas) es mucho más compleja de lo que se tiene de primera impresión, unos metros alrededor de todo este movimiento se respira un aire distinto al de cualquier otro lugar; la caminata a través del puente que conecta esas dos cuidades que por la noche bien podrían ser una vista desde el cielo, lleva una circulación de automóviles lenta, y es ahí donde surge una pregunta en ese aire de hostilidad ¿Cuántas personas sin una credencial “visa láser” estarán intentando cruzar en este momento?
(foto jesús lópez)
Es curioso pero la ciudad debe tener cifras muy infladas respecto a esto, una vez del otro lado no pasa nada extraordinario, ni nada es diferente, el cielo no es más azul, ni el aire más puro, (para cualquiera de nosotros) pero yo estoy seguro que las personas que han logrado esto sin portar esa estampilla en su pasaporte o esa visa láser que dan en el norte, comienzan a vivir, y para ellos el aire del territorio americano si es más puro, el cielo si es más azul y la vida les acaba de brindar un favor, un favor que a cualquiera de nosotros los portadores de la visa americana nos brindo un cónsul de esa nación, tener este documento viene implícito con un cambio en nuestra manera de ver las cosas, ir al paso de “shoping” es como decir voy al S MART de compras. Acá en el DF en las estaciones de autobús uno se encuentra con gente que pide dinero, pues viajaron desde su tierra hasta acá para trabajar y por cualquier circunstancia aun no consiguen laborar, en Juárez me encontré con gente que pedía dinero por que fue deportada de alguna ciudad americana fronteriza, imaginemos Calexico, pues la migra lo fue a dejar sin dinero hasta Ciudad Juárez, y después para volver a intentar cruzar tendrá que hacer cosas de las cuales no tengo la menor idea (y por supuesto que me gustaría contar con esa información), además seguramente en el puente internacional, cualquiera que sea, verá un letrero que amablemente dice “BUEN VIAJE” casi como si estuvieras saliendo del DF y entrando al Estado de México. Todo fácil…………………
Cruzar la frontera norte de México es algo poderoso, es una experiencia que tienes que hacer en compañía de alguien que este dispuesta a asombrarse, una persona que este atenta ante todo lo que se pueda ver en ese trayecto, que este pendiente de los detalles y alerta con una cámara preparada a capturar cualquier momento que parezca minúsculo ante la multitud, la experiencia definitivamente es corta y en menos de lo que crees ya estas fuera del país, ya las calles se llaman diferente y aunque la gente todavía tiene destellos del idioma que en México se habla (en el Paso mucho más de lo que pensé), alla la vida es otra, y es realmente extraño ya que de verdad algo es diferente, algo cambia, difícil de explicar si no lo has vivido pero cuando lo vives es aun más difícil.
(foto jesús lópez)
Es curioso pero la ciudad debe tener cifras muy infladas respecto a esto, una vez del otro lado no pasa nada extraordinario, ni nada es diferente, el cielo no es más azul, ni el aire más puro, (para cualquiera de nosotros) pero yo estoy seguro que las personas que han logrado esto sin portar esa estampilla en su pasaporte o esa visa láser que dan en el norte, comienzan a vivir, y para ellos el aire del territorio americano si es más puro, el cielo si es más azul y la vida les acaba de brindar un favor, un favor que a cualquiera de nosotros los portadores de la visa americana nos brindo un cónsul de esa nación, tener este documento viene implícito con un cambio en nuestra manera de ver las cosas, ir al paso de “shoping” es como decir voy al S MART de compras. Acá en el DF en las estaciones de autobús uno se encuentra con gente que pide dinero, pues viajaron desde su tierra hasta acá para trabajar y por cualquier circunstancia aun no consiguen laborar, en Juárez me encontré con gente que pedía dinero por que fue deportada de alguna ciudad americana fronteriza, imaginemos Calexico, pues la migra lo fue a dejar sin dinero hasta Ciudad Juárez, y después para volver a intentar cruzar tendrá que hacer cosas de las cuales no tengo la menor idea (y por supuesto que me gustaría contar con esa información), además seguramente en el puente internacional, cualquiera que sea, verá un letrero que amablemente dice “BUEN VIAJE” casi como si estuvieras saliendo del DF y entrando al Estado de México. Todo fácil…………………
Cruzar la frontera norte de México es algo poderoso, es una experiencia que tienes que hacer en compañía de alguien que este dispuesta a asombrarse, una persona que este atenta ante todo lo que se pueda ver en ese trayecto, que este pendiente de los detalles y alerta con una cámara preparada a capturar cualquier momento que parezca minúsculo ante la multitud, la experiencia definitivamente es corta y en menos de lo que crees ya estas fuera del país, ya las calles se llaman diferente y aunque la gente todavía tiene destellos del idioma que en México se habla (en el Paso mucho más de lo que pensé), alla la vida es otra, y es realmente extraño ya que de verdad algo es diferente, algo cambia, difícil de explicar si no lo has vivido pero cuando lo vives es aun más difícil.
Vivir todo esto es sencillo, desde el DF solo tienes que tomar un vuelo de Toluca a Cuidad Juárez, los hay de varios precios dependiendo de la temporada y la aerolínea, llegando a Juárez la ciudad no es muy grande así que recomiendo aterrizar o despegar de noche así podrán darse idea de cuales son sus limites.
Jesús López (chucho)
Jesús López (chucho)
2 comentarios:
un ensamble excelente, me quedan cosas pendientes por redactar pero no las olvido...
gracias por enseñarme tanto.
y las que siguen uff!
kises in the close eye!
Ay ay ay...
Espantame panteon!! no seas naco hijo vente pa'ca y cruzamos de Tecojoringo a Pontemeagatas...jojojo
Ya veras que esperiencia.
Aun no te perdono culero por no haberme dejado pintar tu pader, pero igual dile a la pandilla que los estranho y que les llevo su respectivo trozo de baguette, que si quieren algo mas es hora de empezar a hacer peticiones.
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